PREPARACIÓN PREVIA…
- Quitar el pipo a las cerezas y batirlas bien hasta obtener una suave mermelada.
- En media taza de agua templada, disolver 2 cucharaditas de café soluble y 4 cucharaditas de azúcar.
- Cuando esté bien hecha la mezcla, añadir el ron.
- Colocar los bizcochos sobre una bandeja y cubrir bien con la mezcla obtenida en los pasos anteriores. Los bizcochos quedarán rápidamente empapados.
A CONTINUACIÓN…
- En un molde redondo para tarta ponemos en el fondo una gruesa capa de helado de vainilla presionando bien sobre todo el conjunto para que quede bien compacto.
- Sobre el helado colocamos los bizcochos «borrachos» de forma que cubran toda la superficie del molde.
- Con una espátula de cocina esparcimos por encima la mermelada de cereza del primer paso. Ponemos una capa gruesa, como de dos centímetros de grosor.
- La capa de mermelada de cereza la cubrimos de nuevo con una capa de bizcochos.
- Por último cubrimos esta última capa de bizcocho con una capa gruesa de helado.
- Cubrimos el conjunto y lo conservamos en el congelador. Lo dejamos unas horas para que quede bien duro.
- Sacamos nuestro pastel del congelador, y lo ponemos boca abajo en el plato en el que lo vamos a servir.
- Para despegar el pastel del recipiente pasamos una esponja caliente por la parte exterior del mismo, de esta forma el pastel se despegará del molde sin perder su forma.
- Decoramos el conjunto con nata o crema pastelera.
- Colocamos unas cerezas encima a modo de adorno.
- Sobre el centro del pastel rayamos la tableta de chocolate.
- Conservar en el frigorífico hasta el mismo momento de servirlo.