MASA PARA LAS EMPANADAS
- En un recipiente profundo ponemos la harina, la removemos un poco para que esté bien suelta.
- Hacemos un hueco en el centro y añadimos la sal, el azúcar, la mantequilla y 1 taza de agua templada.
- Mezclamos bien todo hasta obtener una masa bien formada y elástica.
- Sobre una superficie plana espolvoreamos harina y sobre esta extendemos la masa hasta obtener una plancha fina. Recortamos círculos de unos 10 cm de diámetro que serán nuestras empanadillas.
RELLENO DE LAS EMPANADILLAS
- Cortamos la cebolla en rodajas muy finas.
- Desmenuzamos el queso fresco de cabra en migas pequeñas.
- Picamos también muy finos los tomates secos.
- En una sartén grande ponemos el aceite de oliva virgen y ponemos a fuego medio hasta que esté muy caliente.
- Sobre este aceite caliente rehogamos la cebolla y ponemos el fuego al mínimo.
- Añadimos el resto de componentes del relleno: el tomate picado y el queso fresco de cabra.
- Removemos continuamente hasta que el conjunto tome un color ligeramente dorado. Retiramos del horno.
- Sobre una bandeja para horno colocamos la masa cortada de las empanadillas y sobre cada una de las porciones, una cucharada de relleno.
- Mojamos ligeramente los bordes de cada porción de masa.
- Doblamos los círculos de masa a la mitad, de forma que envuelvan al relleno. Sellamos cada porción con un tenedor.
A CONTINUACIÓN…
- Precalentamos el horno a 180 grados.
- Introducimos las empanadillas y las dejamos hornear durante aproximadamente 20 minutos.
- Para tener unas empanadillas crujientes, una vez horneadas, podemos dejarlas enfriar, cubrir el conjunto con papel de aluminio y congelar.
- Posteriormente las sacamos del congelador y dejamos que cojan temperatura ambiente antes de servir.